En este artículo vamos a explicar el último de los 10 mandamientos de la pareja según Bert Hellinger. Aunque hemos abreviado el título por una cuestión de espacio, este mandamiento completo dice lo siguiente:

“La mayor muestra de amor, es realizar mi trabajo personal para sanar el vínculo con mis padres y mis heridas de guerra”.

Como hemos explicado en el artículo anterior, a veces nuestras propias heridas nos llevan a actuar de una manera inapropiada para que la relación fluya de una manera sana. A veces somos conscientes de ello, a veces no. Cuando tomamos consciencia, a veces queremos cambiar, pero no podemos. Y es que no es fácil deshacerse de ciertos patrones muy arraigados en nuestro subconsciente y puede producirse una auténtica lucha interna que nos mantiene en conflicto con nosotros mismo e, inevitablemente, con nuestras parejas.

Por ello, es de vital importancia revisar nuestros vínculos. Tal vez pienses que tus padres no hicieron lo suficiente, que tu padre te abandonó, que tu madre te exigió demasiado, que no te prestaron la atención que necesitabas. Pero tus padres te dieron la vida, y gracias a ellos estás hoy aquí.

Somos 50% papá y 50% mamá, y por lo tanto, si no los acepto a ellos, no me estoy aceptando a mí. Y si no me acepto a mí, ¿qué le estoy ofreciendo a mi pareja?

Todos tenemos nuestras heridas de infancia. Absolutamente todos. La cuestión no es tenerlas o no tenerlas, sino trabajarlas para cuando te salte el patrón, poder reconducirlo.

¿Estás dispuesto/a a hacer este trabajo personal?

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